Los viernes de setiembre, la poesía sube a escena en la Luis Franco y patea el atril una vez más. Como hace más de un año, las canciones de Charly García se convierten en poemas o monólogos. La Mother de Pink Floyd dialoga con Alicia, perdida en el país. La juglaresa vuelve a soñar en el jardín, mientras llegan los acordes de La calle en que tú vives, de Mi bella dama. Y un cantor-kamikaze canta en inglés The street where you live, como en la comedia musical, o casi. Y vuelan sonetos. Y Malena vuelve a cantar, con voz de sombra. Y a la sombra del bosque que agoniza se escuchan en catalán los versos de Pare (Padre) de Serrat.
Y la Casada Infiel vuelve a mentir. Y un rollinga se miente que es poeta. Y entre lágrimas negras y dientes de cordero, Borges convoca a Rega Molina y ambos brindan con Vallejo y García Saraví. Nadie sabe por qué Piazzolla deja de tocar al final, detrás del pianista, hasta que lo oyen tararear La bohème, justo cuando el cantor-kamikaze se despide entonando la canción de Aznavour. Cinco Damas Sobre el Piano, el espectáculo teatral-musical donde la poesía sube a escena, ha vuelto a la Luis Franco, en el segundo año de "un éxito con todas las letras".
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